Goodnight Mommy, un remake que no trasciende [Reseña]

Goodnight Mommy es el remake de la excelente película del 2014. Aunque trata de añadirse a la historia original, no la hace suya, ni logra impactar.

Matt Sobel (Take me to the river) es el director de este remake innecesario. La original Goodnight Mommy (Ich Seh, Ich Seh) se estrenó en el 2014, fue dirigida por Severin Fiala y Veronika Franz. Esta nueva versión es protagonizada por Naomi Watts, Cameron Corvetti y Nicholas Corvetti. En ella, unos gemelos llegan a la casa de su madre y pronto comienzan a sospechar que algo no anda bien con ella.

Es difícil tratar de superar una película que fue bastante buena, especialmente si tiene un giro que cuando descubres ya no se puede olvidar. Eso le resta mucho a este remake, ya sabemos hacia dónde va. La película no nos ofrece una interpretación propia de la historia. Se apega a ella añadiendo ciertos elementos muy enfocados al público estadounidense con efectos que le dan un aire sobrenatural, pero nada más.

Viéndola como una película aislada, para quienes no han visto la original, puede funcionar bien. Nos retrata a una madre que está pasando por un momento difícil, busca la comprensión de sus hijos y obtiene todo menos eso. Vemos a una mujer frustrada que intenta arreglar su vida con un cambio y no sabe cómo manejar la situación. Incluso, nos retrata una situación de abuso. Los niños lo hacen bien y comienzan a alimentar su propia fantasía cargada de miedo referente a esta madre que se porta muy diferente. Aunque, esta versión se aleja completamente del suspenso para darnos una visión un poco más dramática.

Goodnight Mommy puede dormir tranquilamente en el montón de remakes innecesarios. Sin embargo, para quienes todavía no ven la original, puede funcionar como un buen thriller y pasar el rato. Aunque siempre les recomendamos ver la original y quedarse con ella. La nueva pueden disfrutarla en Amazon Prime Video.

Goodnight Mommy [Tráiler]